Debian nos permite seleccionar algunos grupos de software. En este caso he seleccionado el sistema estándar y de escritorio. Esto me permitirá trabajar con el gestor GNOME una vez terminada la instalación.
Cuando uno instala un servidor podría no seleccionar nada y empezar con un sistema desde cero. Gracias a la magia de apt/aptitude será muy fácil ir armando un sistema minimalista.